Este estilo aplica perfecto para esos momentos en los que queremos lucir producidas pero no muy recargadas de maquillaje.
Este look puede realizarse de varias formas. Algunas más profesionales que otras, pero este que compartimos con ustedes es bastante básico y nos funcionará a todas en momentos en los que no contamos con mucho tiempo.
Lo primero que debes hacer es preparar la piel de tu rostro. Limpia e hidrata para luego aplicar una capa de base. Sino, utiliza tu corrector habitual para las ojeras y algunos puntos específicos que quieras corregir.
Busca tu iluminador, blush o bronzer (si estás bronceada) habitual, tu mascara de pestañas y un labial estilo gloss. Ahora existe una gran variedad. Estos Baby Lips de Maybelline son buena opción ya que hidratan, no son pegostosos y vienen en diferentes tonalidades. Algo muy sutil.
Aplica el rubor en tus pómulos y agrega un poco de luminosidad, lúcete con tu mascara de pestañas para destacar la mirada y ponte un poco de labial hidrantante.
Este estilo no quiere decir “no me eché nada en el rostro”, sino un “destaco la belleza natural de mi rostro con pocos toques de maquillaje”.
Aquí te dejamos una guía de colores según sea tu tono de piel. Recuerda que el labial es dde tipo lip gloss o hidratante (bálsamo) con un poco de color.