Ir al gimnasio no significa que debas perder todo el glamour, al contrario si te tomas el tiempo necesario para verte y sentirte linda , te ayudará a conseguir mejores resultados durante tu entrenamiento . En algunas ocasiones es difícil encontrar la fuerza de voluntad  para ejercitarte diariamente y  aunque no lo creas lucir bien puede ser un gran aliciente para conseguir tu objetivo. Victoria te da consejos para que tengas un gym glam.

La elegancia es mucho más que solo el estilo de vestir, en pocas palabras, la elegancia es la energía global que se emite de nosotras. Se nota en la forma de caminar, la presencia, la forma de hablar e incluso el tono de la voz. Al final, podemos definir una mujer elegante por los pequeños detalles que fascinan y atraen a otros. En este artículo, te presento los secretos que forman la base de la elegancia femenina, es decir son los fundamentales que deberías dominar para lucir con carisma, estilo y elegancia. 

Se considera VINTAGE, cuando una pieza tiene un mínimo de 20 años, y los más hermoso es que cada pieza tiene una historia, lo que la hace única y especial. Buscar piezas vintage es como buscar un tesoro, nunca sabes lo que vas a encontrar, lo que si estoy segura, es qué si sabes elegir, te proporcionarán, originalidad, individualidad, y buen gusto, pero surge la gran pregunta: ¿Cómo uso ropa VINTAGE sin lucir como una abuelita?

Por Deicy Sanabria

Si tienes tu propia empresa, debes tener una imagen personal profesional y accesible, que te permita hacer frente a las reuniones de trabajo con clientes, proveedores o asistir a eventos. Hoy te quiero dejar algunas recomendaciones para que puedas adaptarte a distintas circunstancias, vistiendo de forma versátil sin dejar de lado tu estilo y tu esencia femenina. Te dejo varias consejos para lograrlo

por Gerianne Fang Ordoñez

Soy mamá y aparte de mi rol como madre, también tengo un trabajo de tiempo completo en el que uso la mayoría de veces mi otro “uniforme”. Por una parte, resulta una "ventaja", puesto me ahorro dinero para comprar ropa cada cierto tiempo, pero, por otro lado, se convierte en un pequeño lío cuando debo cumplir algún compromiso y no encuentro "que ponerme".