Por Edna Luna
Es impresionante la cantidad de horas que nuestro rostro pasa sobre la almohada y lo que afecta a la piel.
Cada vez que vamos a dormir, debemos cuidar que la piel de nuestro rostro y cuello esté lo más lisa posible para evitar arrugarla, y mantenerla así por largos períodos de tiempo. Pues nuestra piel es como un trozo de papel que, cuando lo arrugas y después lo extiendes, ya no vuelve a estar completamente igual.
Nuestra piel es como una plastilina, y cada mañana al despertar podrás notar las marcas provocadas por el doblez sobre la almohada. Líneas que comúnmente se convertirán en líneas de expresión.
Algunos consejos para cuidar tu piel:
Te recomiendo dormir boca arriba sobre una almohada no tan gruesa para evitar doblar el cuello y generar esa indeseable papada. Será óptimo una almohada que tenga el ancho de tu hombro, que al recostar tu rostro no se hagan dobleces.
Analiza tu forma de dormir y los pliegues que puede generar tu almohada.
Para elegir el ancho adecuado, te recomiendo llevar contigo un espejo, recostar tu rostro y observar en el espejo si tu almohada genera dobleces que afecten tus facciones. Entonces decidirás si habrá que cambiar el tamaño o mantener el mismo.
Si aplicas algún producto en la rutina nocturna de tu rostro, procura esperar de 5-10 minutos antes de recostarte, para que tu piel absorba lo que aplicaste.
Cuida, además, de tener la funda de la almohada siempre limpia para evitar problemas en tu piel. Procura lavarla al menos cada 5-7 días con detergente que no sea agresivo a la piel.
Existen muchas opciones de almohadas en el mercado, pero es recomendable elegir alguna con fundas suaves como seda u algodón.
No hay una fecha estándar, pero especialistas recomiendan cambiar de almohada cada 18 meses, porque pasado este tiempo los materiales se deterioran o deforman, también por cuestiones de higiene.
Elle / Allure / Ecosa
Un consejo extra, es que si vas de vacaciones, lleves contigo un trozo de tela suave que puedas poner sobre la almohada del hotel. Y si esta no tiene el ancho adecuado, puedes armar tu propia almohada con toallas y poner la tela de seda o algodón por encima.
Es difícil controlar nuestra posición durante el sueño, pero estoy segura que estos consejos te ayudarán a prevenir indeseables arrugas.
Espero recuerdes esto cada noche antes de dormir y despertar con un rostro diferente.
Edna Luna
Fashion Stylist
Chicago USA
@edna_luna