Cuando tú eres la que te maquillas surgen varias dudas: como qué te queda bien, qué debes hacer y cómo. Si esto te preocupa, porque sientes que no sabes o no obtienes los resultados que esperas, podrías acudir a un profesional del área cuyo estilo te guste y realizar un taller con el donde te asesore sobre que estilos te favorecen más.
Sin embargo, aunque como profesores les proporcionemos las técnicas no deben olvidar que son ustedes las que desarrollaran su propio estilo acorde a sus actividades diarias y a la imagen que deseen proyectar, en este sentido el autoconocimiento posee un rol fundamental.
Así como hay cosas que valen la pena probar cuando te maquillas hay otras con las cuales debes tener cuidado:
Ropa y maquillaje del mismo color:
Esta tendencia fue muy común en los 80´s. Sin embargo, 30 años más tarde ha quedado desplazada por el uso de colores tierra.
Si quieres verte natural o colores que complementen tu atuendo pero que no sea el predominante, pues hacen que la que lo usa se vea plana pues no hay punto focal dentro del look, además de que lejos de lograr una apariencia natural o de tendencia el acabado es totalmente fuera de moda.
Fe ciega en los tutoriales:
Este tema es algo delicado pues, como alguien que graba tutoriales, les puedo decir que se hacen de la manera más flexible posible de modo que sean adaptables la mayor cantidad de público posible.
Sin embargo opino que de este tipo de método de enseñanza, podemos tomar lo que más nos sirva sin dejar de lado nuestras características personales y sobretodo fijarnos que tutoriales estamos viendo y quien los realiza.
Pues en internet hay de todo y a veces las técnicas no son las más apropiadas o incluso sugieren el uso de productos inadecuados para ser aplicados ene l rostro, así que mucho cuidado.
Pretender quedar igual que la foto de la celebridad de moda:
Es común que muchas chicas consigan fotos referenciales para un look determinado, pues les agrada la imagen que ven.
Lo que debe evitarse es pretender quedar exactamente igual, porque aunque nuestras características sean semejantes, tenemos cosas que nos hacen únicas, esto es primordial a la hora de elegir un look que refleje quiénes somos y no quien es alguien más.
Acá la aceptación es factor determinante para que logres un look con el que te sientas a gusto.
Elección incorrecta de la base o corrector:
A veces queremos vernos más claras o más bronceadas de lo que en realidad somos o realizar un contorno de rostro sin poseer conocimientos sólidos en esa área. Es allí cuando el problema empieza pues la base es el producto de maquillaje que cubre todo el rostro y su elección incorrecta puede generar un efecto máscara.
La mala elección del corrector puede causar el indeseable efecto mapache, que deja el área de los ojos como si la `persona tiene un antifaz, para ambos casos lo mejor es elegir el tono más semejante a tu piel, que el mismo se pierda en el rostro generara óptimos resultados.
